Ximena Sariñana de la pantalla grande a icono pop

La tapatía favorita del pop en español antes de llegar a los grandes escenarios como cantante, desarrollo uno de sus más grandes talentos; la actuación.

Desde muy pequeña Ximena empezó a construir su carrera dentro de los medios televisivos, participando en comerciales y telenovelas, dentro de su familia esto no fue algo nuevo, ya que ambos padres estaban involucrados en los medios. Su primer papel reconocido a nivel nacional se trató de la pequeña Mariela, la villana en la novela de Luz Clarita, papel que le permite obtener el reconocimiento del público. Su figura como actriz sería fuertemente consolidada en el 2002, a raíz de su participación en la película “Amarte duele”, dirigida por su padre; Fernando Sariñana.

Esta cinta marcó un antes y un después no solo para la tapatía sino para el cine mexicano ya que “Amarte duele” sería nominada a varias premiaciones en diferentes categorías, más tarde pasaría a ser una película de culto para el cine mexicano.

Es en este mismo proyecto donde Ximena comenzaría a experimentar un acercamiento con la música ya que fue la compositora y cantante de algunas canciones de la banda sonora, éxitos cómo "Cuento” o “Mañana no es hoy”, piezas claves que permiten ambientar el filme con ese toque trágico y romántico que comenzaría a tener influencia sobre su esencia como cantante.

Más tarde Ximena comenzó su carrera musical en el 2006 con la banda llamada “Feliz no cumpleaños” con la que grabó su primer EP; “La familia feliz” sin embargo, un año después, en 2007, inició su carrera como solista y lanzó su álbum debut “Mediocre” en 2008, el cual terminaría por definir su esencia.

A día de hoy la cantante tapatía busca revolucionarse a través de su arte y con ello lanzó a la luz su nuevo álbum "Existencia Kamikaze”, un giro diferente que nos muestra la capacidad y versatilidad de su voz. Con ello Ximena regresa a los escenarios el próximo 14 de noviembre en el Teatro Metropólitan, no te pierdas la oportunidad de formar parte de esta nueva revolución.

Nota por Itzel González